La comunicación forma parte de nuestra cotidianeidad. Es más, sin la posibilidad de emitir y de decodificar mensajes, los seres humanos perderíamos gran parte de nuestras características. No importa si se trata de comprender una conversación, un texto escrito o las señales corporales de otra persona, constantemente nos comunicamos para expresar nuestras ideas e intenciones.
La hermenéutica viene de la mano de la comunicación, ya que se dedica a su estudio. Esta disciplina es por demás antigua, teniendo sus orígenes lugar en la Modernidad. Si quieres conocer más acerca de ella, sus finalidades y aplicaciones, sigue leyendo este artículo.
¿En qué consiste la hermenéutica?
La hermenéutica, término de origen griego, consiste en la interpretación, explicación y traducción de la comunicación, tanto escrita y verbal, como no verbal. Esta disciplina se vuelve necesaria ante las complejidades del lenguaje y del circuito de la comunicación, su posibilidad de interpretaciones diversas, así como de errores interpretativos.
Aunque no tomes conocimiento de ello, al comunicarte o recibir información, también al pensar y establecer tus ideas, siempre estás practicando hermenéutica. Este método ha sido estudiado por centenares de filósofos, ante la necesidad de comprender la complejidad de la interpretación de una persona a otra.
Friedrich Schleiermacher, teólogo, filólogo y filósofo alemán en la modernidad fue su fundador; por ello es reconocido por haber sido teórico de la hermenéutica. Desde entonces, la hermenéutica responde al objetivo de alcanzar a comprender las ideas o desarrollos del discurso de una persona mejor de lo que esta se conoce a sí misma.
Podríamos así establecer que la hermenéutica se propone descifrar el significado no evidenciable a simple vista o complejo que subyace cualquier discurso. Intenta extraer el significado a lo dado, lo que se conoce como exégesis. Sin embargo, va más allá, en su esfuerzo por captar aquello que no puede comprenderse fácilmente.
En Psicología, Wilhelm Dilthey (autor de “La comprensión de otras personas y de sus manifestaciones de vida”) ha hecho sus correspondientes aportes, proponiendo que la comprensión de un ser humano de un mensaje determinado siempre debe ser comprendida en un tiempo, lugar y contexto determinado. Los sujetos nos situamos en un entorno particular que condiciona nuestra comprensión.
Principales aplicaciones
La hermenéutica consiste en el estudio de la comunicación, su explicación y comprensión. Eso mismo hace que su campo de aplicación sea amplio por demás, sin embargo, existen ciertas disciplinas en las que se aplica más comúnmente. Tales son:
- Educación. La hermenéutica le permite al educador comprender el amplio sentido de la realidad, así como las diferentes formas de comprender que tendrán cada uno de sus estudiantes.
- Psicología. Esta ciencia estudia al ser humano, sus procesos mentales, puntualmente. La comunicación y su desciframiento es en un ciento por ciento mental. Por lo tanto, la hermenéutica aplicada a la Psicología es de gran ayuda para ampliar el campo de estudio.
- Cuando se trata de comprender un autor, la hermenéutica podría llegar a ser útil en Literatura. Esta permite descifrar el mensaje del autor, más allá de lo meramente escrito.
Estos no son todos, pero sí los más regulares campos de aplicación de la hermenéutica. Esta, como podrás ver, comprende variadas finalidades, por ello se la considera sumamente compleja.
El círculo hermenéutico
Por “círculo hermenéutico” se conoce al proceso de comprensión que se opera en cualquier circunstancia al recibir un mensaje directa o indirectamente. Este es un proceso circular, y de allí el término “círculo hermenéutico”. Circular porque no tiene un principio o final, tampoco elementos separados que den indicio de inicio y término. La comunicación se desarrolla con fluidez, momento a momento, y el sujeto que capta un mensaje ya tiene preestablecidas ideas y concepciones, que afectan su comprensión.
El intérprete no es una página en blanco que el mensaje viene a completar, sus concepciones previas afectarán aquello que pudiese captar de él. Esto hace al círculo hermenéutico (de comprensión) inacabable, infinito, en fin: circular. Ante un mismo gesto, texto o discurso, siempre existirá una interpretación diversa, que dependerá de quién la realice, su pasado y presente en un determinado momento y lugar.
El círculo hermenéutico es más bien un infinito, un sinfín de nuevas conclusiones rompiendo prejuicios y reemplazándolos por nuevas concepciones. Seguro alguna vez has experimentado el enfrentarte a una situación nueva, pero teniendo una idea previa respecto a ello, llevándote una sorpresa por el resultado final. Este es un claro ejemplo de lo que resulta el círculo hermenéutico, una constante interacción entre preconcepciones obtenidas gracias a antiguos mensajes comprendidos y los nuevos mensajes recibidos que pueden (o no) contradecirse.
La concepción de círculo hermenéutico rompe con la idea del conocimiento como algo lineal, como un estado o como algo estable. Esta concepción apunta al conocimiento como un proceso en constante modificación y revisión. Mientras se experimente y se produzcan intercambios con la naturaleza o con otras personas siempre habrá posibilidad de expandir el conocimiento.
Conclusiones acerca de la hermenéutica
En fin, la hermenéutica, como has visto, consiste en el conocimiento en profundidad acerca de los mensajes que son emitidos, pudiendo estos ser desde textos literarios, hasta movimientos corporales o expresiones orales.
Los seres humanos nos desarrollamos en sociedad, y el tiempo y lugar en que habitamos (y en los que lo hicimos en un pasado) condicionan nuestras concepciones acerca de lo que conocemos y, por supuesto, acerca de lo que nos resulta desconocido. Los prejuicios llegan así a invadir nuestras ideas, y la hermenéutica viene a descifrar las cuestiones que no son a simple vista perceptibles en la comunicación. ¿Habías oído hablar acerca de ella y sus aplicaciones en diversos ámbitos?
Referencias bibliográficas
- Bontekoe, R. (1996). Dimensions of the hermeneutic circle.
- Ferraris, M. (2000). Historia de la hermenéutica (Vol. 1). Ediciones Akal.
- Grondin, J. (2015). The hermeneutical circle. A Companion to Hermeneutics, 299-305.