La dermatitis por estrés es una afección cutánea que puede ser causada por el estrés emocional. Los síntomas incluyen enrojecimiento, picazón y descamación de la piel. Afortunadamente, hay varias formas de tratar esta afección, desde reducir el estrés hasta usar cremas y lociones especiales. Descubre cómo tratar la dermatitis por estrés con estos consejos útiles.
Comprender los síntomas y causas de la dermatitis por estrés
El desarrollo de la dermatitis por estrés puede provenir de una multitud de factores estresantes, ya sean de naturaleza física o emocional.
Los factores estresantes físicos, como la exposición a productos químicos o el uso prolongado de equipos de protección personal, pueden provocar una respuesta al estrés en el cuerpo.
Por otro lado, los eventos emocionales o psicológicos, como el divorcio, el fallecimiento de un ser querido o la presión en el trabajo, también pueden desencadenar estrés. El estrés crónico puede comprometer el sistema inmunológico, lo que puede provocar la aparición de dermatitis.
Además, el estrés prolongado puede alterar el equilibrio hormonal del cuerpo, causando una sobreproducción de sebo en la piel y aumentando la probabilidad de acné.
¿Cómo saber si tengo dermatitis por estrés?
La manifestación de síntomas en la dermatitis atópica por estrés se asocia típicamente con un brote temporal y circunstancial. Esta asociación es a menudo más o menos evidente y se suele identificar con un momento vital especialmente estresante.
Si el estrés es la causa principal, lo más probable es que aparezcan estos brotes de dermatitis en un espacio de tiempo cercano después del evento o durante el evento.
Algo que también te indicará que es dermatitis por estrés es si la propia tensión emocional y/o emocional del evento empeora los síntomas de la dermatitis, es decir, si notas aún más picor, enrojecimiento, etc. Cuando estás atravesando una época intensa en estrés.
Principales Síntomas
Podemos ir del rango de leves a síntomas más graves. La piel por lo general puede mostrar síntomas del tipo:
- Picor
- Irritación
- Sequedad
En casos más graves podemos experimentar:
- Ampollas
- Picor intenso
- Sensación de calor
En algunos casos puede llegar a afectar hasta la calidad de vida de la persona. Derivando en ansiedad, depresión y desregulación de los patrones de sueño.
Reducir el estrés y la ansiedad en tu vida
Si sufres de dermatitis por estrés, es fundamental reducir el estrés y la ansiedad en tu vida. Puedes hacerlo mediante la práctica de técnicas de relajación como la meditación, el yoga o la respiración profunda. También es crucial identificar y evitar los desencadenantes de estrés en tu vida, como situaciones estresantes en el trabajo o en las relaciones personales. Además, asegúrate de cuidar tu piel adecuadamente con productos suaves y humectantes para evitar la sequedad y la irritación.
Algunas de las cosas que puedes hacer para llevar a cabo una mejor gestión del estrés son:
- Adquirir la capacidad de reconocer los factores o circunstancias que inducen el estrés y desencadenan la aparición de los episodios de dermatitis que experimentamos.
- Incorporar métodos de relajación y respiración para lograr una sensación de equilibrio y calma.
- Participar en actividades que no son exclusivamente para la relajación, pero todavía tienen un efecto calmante a nivel individual, como leer, caminar, escuchar música, cocinar o hacer bordados.
- La incorporación de la actividad física regular en tu rutina puede tener un impacto positivo en tu bienestar emocional y físico. Hacer ejercicio puede llevarte a sentirte más saludable y más seguro de tu cuerpo, en última instancia, aumentar la autoestima.
- Empezar a llevar un estilo de vida saludable consumiendo una dieta nutritiva y proporcionada y evitando al máximo conductas poco saludables como el consumo de alcohol o fumar.
Cuidar adecuadamente la piel afectada
Es importante cuidar adecuadamente la piel afectada para evitar la sequedad y la irritación. Usa productos suaves y humectantes para mantener la piel hidratada y evitar el uso de productos que contengan fragancias o ingredientes irritantes.
También es importante evitar rascarse o frotar la piel afectada, ya que esto puede empeorar la inflamación y la irritación. Si la dermatitis por estrés persiste o empeora, consulta a un dermatólogo para obtener tratamiento adicional.
Emplear productos suaves y naturales para el cuidado de la piel
Si sufres de dermatitis por estrés, te recomendamos que cuides tu piel con productos suaves y naturales.
Evita los productos que contengan fragancias o ingredientes irritantes, ya que pueden empeorar la inflamación y la irritación.
En su lugar, opta por productos suaves y humectantes que ayuden a mantener la piel hidratada y protegida. Además, asegúrate de no rascarte o frotar la piel afectada, puesto que esto puede empeorar los síntomas. Si tienes dudas sobre qué productos son los más adecuados para tu piel, consulta a un dermatólogo para obtener recomendaciones personalizadas.
Consultar a un dermatólogo si los síntomas continúan o empeoran
Si bien existen medidas que puedes tomar en casa, es importante que consultes a un dermatólogo si ves que los síntomas van a peor o no se reduce su intensidad.
Un dermatólogo puede ayudarte a identificar la causa subyacente de la dermatitis y recomendarte un tratamiento adecuado, para tu caso, teniendo en cuenta tus características personales.
Además, pueden recetarte medicamentos tópicos o sistémicos para reducir la inflamación y la irritación de la piel. No dudes en buscar ayuda profesional si necesitas tratar la dermatitis por estrés de manera efectiva.